RESEÑA HISTÓRICA
No existen testimonios escritos antes del siglo X.
Los primeros pueblos que habitaron la cuenca del Oja, según J. Bta. Merino, que se basa en estudios de la toponimia del lugar, fueron los Autrigones y los Berones.
De la época neolítica se han encontrado una punta de flecha de pedernal, cerca de la Tejera, y un hacha pulimentada de canto rodado, por la zona de los Trigales; existen otras hachas de pedernal, sin constancia del lugar del hallazgo.
Por Zabárrula, Ulizarna y Arviza se han localizado hachas de piedra (llamadas piedra de rayo por los vecinos) idénticas a las hachas pulimentadas del neolítico encontradas en Ezcaray y en Tres Fuentes.
De la Edad del Hierro y de la del Bronce se ha encontrado una punta de lanza de bronce, con hueco para meter un palo, al pie de la Peña de San Torcuato.
En la época romana, estas tierras pertenecieron a la provincia Tarraconense.
Parece ser que en Ojacastro hubo un asentamiento romano de tipo militar.
En la falda sur de la Peña San Torcuato, se han hallado sepulturas y monedas de la época romana y una herramienta de hierro. Estas sepulturas son semejantes a las aparecidas en la localidad de Ojacastro, en el barrio de Nuza.
Fuente: «El río Oja y su Comarca», de Juan Bta. Merino Urrutia.- Fotografía de la herramienta y del hacha, del mismo libro.